Tiranos en la red

Al final ha ocurrido lo que se temía y la Asamblea Francesa ha aprobado los cortes en Internet en su polémica ley de protección de derechos en Internet.

A los internautas que realicen “descargas ilegales” recibirán una respuesta que denominan gradual: primero un e-mail como advertencia, si persiste recibirá una carta por correo certificado y si reincide en los seis meses siguientes una comisión integrada por tres jueces podrá decidir si al internauta se le anula el contrato y además verse limitado a no poder contratar el servicio entre dos meses y un año.

La suspensión del servicio de Internet como sanción se es una medida que ya se ha aprobado en EEUU, Irlanda e Italia, aunque otros países europeos han renunciado a ella.

Esto me lleva a pensar una vez más en el eterno conflicto con las sociedades de autores, que parecen estar definidas por el mismo patrón o modelo en todo el mundo. Según su punto de vista todos los internautas somos unos piratas en potencia. De hecho pagas unos cánones cuando adquieres, CDs, DVDs, discos duros, y cualquier otro medio de almacenamiento con el incalificable argumento de que como en él podemos descargarnos archivos con derechos de autor, pues toma, por si acaso ¡a pagar!

Creo que es indigno que tengamos que cargar con una culpa por el hecho de adquirir algo para guardar, por ejemplo, toda la documentación de mis estudios, o una copia de seguridad de mi ordenador, o viejas películas en VHS que deseo guardar en CD o mil situaciones similares que nada tienen que ver “con derechos de autor” y que no justifica el canon que he tenido que pagar por ello. ¿Quiénes son los piratas?

Creo que tienen, como todos, el derecho a proteger sus intereses o el de sus integrantes, pero ¡cuan poderosas son estas agencias! que logran preservar su privilegios con abusivos métodos y con el beneplácito y la aprobación de las autoridades de los distintos países. Todas las épocas tienen sus tiranos y a mi modo de ver son los déspotas cibernéticos de nuestra época.

Hasta pronto.